Libros
Exitus |
Marchito azar verdiblanco El libro comienza hablando de las visitas infantiles del autor al estadio Benito Villamarín y cómo fue tomando conciencia de los comportamientos propios del fútbol y de la fauna bética. “Tampoco antes había vida, y menos aún los domingos, sin chicles para las aceras, gorras para calvos, transistores ceutíes, trompetas de plástico para sordos o impotentes, banderas para anarquistas a tiempo parcial… No hay vida ahora. No la hay”, escribe. En las páginas restantes, Antonio Luque realiza un repaso por los acontecimientos más significativos del beticismo, y los integra en su biografía personal, todo con el estilo costumbrista y descreído que le caracteriza. |
Socorrismo Por fin Antonio Luque se pasa al bando de la literatura. En su debut, el líder del grupo Sr. Chinarro nos obsequia con dos relatos, Socorrismo y La Mina, en los que el realismo burlesco de Mortadelo y Filemón se combina con la mejor sorpresa lírica. En el primer relato, que da título al libro, Luque nos ofrece una historia de amor mágica y doliente entre dos tocayos, Augusto (de Valencia, España) y Augusta (de Valencia, Venezuela), ingeniero aristotélico él y afrodita nacida de las aguas ella. En el segundo relato, La Mina, Luque relata las aventuras y desventuras acontecidas en un pueblucho cuyos habitantes, de una u otra manera, están vinculados a la mina del lugar. A través de su visión afilada, el autor ensarta con ingenio refranero las tertulias en el Bar Petardo, las andanzas del Club de fútbol Atlético Minero y los peligrosos peligros de la cianuración. El mejor Antonio Luque en estado puro. |